domingo, 11 de junio de 2017
Bar FACSO
Don Fabi, Julio Cortázar, Stanley Kubrick, Jack Nicholson, Antonio Gramsci, Robert De Niro y Simone de Beauvoir están en el bar de la FACSO/UCE hablando sobre comunicación. El primero en pronunciarse debido a la carga histórica de su representación -antropomorfización de la comunicación interna de una facultad en la que no existe tal, porque es casi un mito eso de que en la facultad de comunicación practican lo que conocen- es Fabián Uziña. "¿Ustedes creen en serio que los wambras de la facultad se van a sentir inspirados? Verán, no me mal entiendan, por favor. Yo mismo en muchas ocasiones mientras estoy en la biblioteca escucho las conversaciones que los estudiantes tienen...y preocupan" dijo Don Fabi mientras encendía un tabaco y le daba una larga pitada aún preguntándose cómo, hasta ahora, poquísimas y contadas veces había visto incidencia de estudiantes hacia estudiantes como creadores de alternativas comunicativas que hicieran realidad la fórmula teoría/práxis: aprender haciendo. Los textos de la copiadora parecerían ser sólo recipiente de polvo y no de dudas prácticas, diálogos. "¿Y porqué no se sentirían inspirados? Me imagino que al ser una facultad de comunicación, lo primordial, es nutrir a la mente de libros que construyan ideas transformadoras. Necesariamente se apoyan en la literatura para esto también, ¿no es así? Comunicador que no lee no existe, y aún más si hablamos de literatura" respondía Cortázar con su particular forma de arrastrar las erres, a lo francés, pero no por el lenguaje sino por un filtro causal de su propia boca. "Lo que precisan es un sentido fresco de propósito y afirmación" comentaba Kubrick mientras les mostraba su guión original para Inteligencia Artificial a Jack Nicholson y a Robert De Niro quienes, como niños, se maravillaban ante el asombro de lo nuevo y desconocido. "Su acción política es lo que refleja su praxis" decía Gramsci acomodando sus característicos lentes redondos. "Su sujeto colectivo, en este caso la facultad, debería ser una fuerza contra hegemónica que actúe desde la cultura para crear nuevos modelos de revolución". "Yo creo que aún desconocen su sensibilidad, es decir, el reconocimiento de sus límites para rebelarse contra ellos" le contestaba Simone de Beauvoir al periodista italiano. "Todo sujeto trasciende y se afirma a través de sus proyectos" concluyó la filósofa francesa.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario